Cambiar opiniones no es una tarea fácil, y mucho menos si dicho intento viene por parte de una marca.
Las personas somos desconfiadas, está en nuestra especie, y las marcas deben saber cuál es la mejor manera de cambiar las opiniones de los posibles compradores. Pues bien, una de ellas es conseguir que las personas que se encuentran en el círculo cercano de quien debe ser convencido, sean las que cambien su manera de pensar.
Todos habremos hecho caso a lo que nos dice nuestro mejor amigo, pero lo mismo nos habría sonado un tanto exagerado si hubiese sido emitido por parte de una marca.
En la superficie comercial es de vital importancia saber convencer a los consumidores. En el caso de que éstos tengan una opinión negativa de la marca en cuestión, será necesario modificarla y hacer que se replanteen la elección de producto. Para ello se utilizan pantallas de publicidad dinámica que pueden incrementar notablemente su eficiencia cuando sean combinadas con personal en el punto de venta. Dichas personas tendrán que informar a los individuos y solucionar sus posibles dudas.
Es muy importante que el personal al que confiemos la comunicación de cara al exterior de nuestra marca, esté cuidadosamente preparado para contestar todo tipo de preguntas. Nunca podrán ponerse nerviosos o perder la razón. Pues son ellos los que dan voz a la marca y los que la representan ante los posibles compradores.
