No cabe duda alguna de que la publicidad dinámica eficiente es aquella que tiene por objetivo convertir al individuo en el protagonista. Y es que de nada sirven los mensajes artificiales y puramente comerciales que deciden vender el producto del modo clásico, dejando de lado la creatividad y originalidad.
El paradigma comunicacional ha cambiado, es por ello por lo que las marcas deben adaptar sus mensajes al modo eficiente de comunicar. Si desean captar la atención de los posibles compradores, deberán aprender su lenguaje y saber que convertirles en estrellas y protagonistas de la historia contada hará que su lealtad sea auténtica.
La publicidad dinámica en el punto de venta debe perseguir el objetivo de convertir al individuo en alguien especial, de mostrarle que su vida es la que de verdad importa y que exactamente por ello la marca se ha propuesto sacarle una sonrisa.
En una actualidad en la que el pesimismo es una realidad, las marcas deben acabar con esto y buscar las cosas positivas de la vida. Son ellas las que deben aprender a sacar una sonrisa a todo individuo, dejando de lado su rutina diaria y evadiéndolo de los problemas.
Por supuesto, esto es algo difícil y digno de ser premiado. Los individuos son conscientes de ello y premian a las marcas que consiguen superar el reto, se trata de una constante competición por hacer felices a los individuos y convertir su rutina en algo espectacular.
¿Y tú? ¿Has tenido alguna experiencia de este tipo en el punto de venta?
